“¡Qué admirable y digna de atención es nuestra situación, la de los hijos de esta Tierra! Cada uno de nosotros sólo se halla aquí para cumplir una breve visita. No sabemos con qué fin, aunque a veces creemos sentirlo. Desde el punto de vista de la vida cotidiana, y sin reflexionar con más profundidad, sabemos lo siguiente: estamos en la Tierra para los demás, y en primer lugar, para aquellos de cuya sonrisa y bienestar depende plenamente nuestra propia dicha. También existimos para los innumerables desconocidos con cuyo destino nos ligan y encadenan lazos de simpatía”. – Albert Einstein
Pensemos en el átomo como una realidad impermanente y maleable, el átomo no es una cosa es una tendencia, posibilidad, energía en movimiento. Nosotros somos parte de esa cuántica. Pertenecemos al universo, formados de esos mismos átomos con sus posibilidades y tendencias.
Cuando nacemos existe una energía numerológica particular (con sus átomos y moléculas), presente en el mundo que nos rodea en ese instante. Esta energía está dentro nuestro y es una parte permanente de la señal que transmite al mundo que nos rodea.
Esta energía que sintoniza constantemente con el Universo es parte de nuestro Dharma, numerológicamente hablando nuestro Destino, Camino de vida. Es nuestra tendencia cuántica, impermanente, cambiante, la formadora de nuestra realidad. Por lo que se convierte en nuestro aspecto numerológico más importante. Es consciencia Universal, poseedora de sabiduría, conocimiento e iluminación.
Desplegar la luz de la fecha de nacimiento, mantener alta su frecuencia numerológica, es la clave para avanzar plenamente en el camino de vida presente.
AlmaNumérica © – Diana Karina Prevende
Numerología Intuitiva©
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